Las Montañas de Caldrin son heladas y peligrosas, donde el mayor peligro no es el clima, sino la envidia que envenena a cada habitante. Las aldeas aquí viven en constante desconfianza, cada una convencida de que las demás tienen algo mejor. Esta desconfianza ha generado una cadena interminable de traiciones, robos y resentimientos que han destruido cualquier esperanza de paz.
Estética
Las montañas están cubiertas de nieve y hielo, y en medio de los picos y valles se ocultan aldeas que desconfían unas de otras. Los valles son hermosos, llenos de cuevas y secretos, pero el resentimiento de los habitantes les impide disfrutar de su entorno.